La percepción de seguridad ha caído en los neivanos debido a la creciente ola de robos que se han presentado en la ciudad, pero aún más tras la muerte del joven empresario Richard Castro, asesinado cuando le robaron el dinero producido en su negocio el pasado lunes.
En redes sociales son repetitivas las denuncias desde todos los sectores de Neiva, de robos con arma blanca (cuchillo) y negra (revolver) en donde la mayoría de los casos las víctimas resultan ser mujeres.
Denuncia tomada de Facebook
A eso se le suma los casos de acoso callejero a féminas que documentan en sus propios perfiles, los angustiantes momentos que deben vivir cuando son perseguidas y acosadas por sujetos en moto, y casos en servicios de transporte como taxis donde terminan siendo acosadas por los conductores.
Asaltos a viviendas, vehículos, establecimientos comerciales, a personas en la calle y una reciente modalidad de estafa que consiste en suplantar a personas en redes sociales para pedirles dinero a sus amigos y conocidos, son las denuncias que llegan a diario a la Fiscalía.
En muchas ocasiones los ladrones y criminales son detenidos pero terminan absueltos de cargos por falta de denuncia luego de cometer sus delitos. Lo que incrementa la perspectiva desfavorable a las autoridades.
Otra razón que los neivanos contemplan al incremento de la inseguridad, es la permisividad de motos con parrillero en el microcentro de la ciudad, lugar donde ocurren la mayoría de robos en forma de «raponazo».
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